lunes, 18 de julio de 2011

...

Lentamente te alejas arrastrando mi corazón herido, mis lágrimas no recaban tu duro corazón congelado de mentiras…
Intento alcanzarte y no puedo más que arrastrarme en mi dolor, suplicar un segundo de aquel tiempo que antes me pertenecía y hoy me niegas como a un desconocido… no entiendo, soy incapaz de comprender motivos, no veo más allá de mi dolor…

Me levanto, camino, respiro, pero no siento mis pasos al andar, mi voz se ve rota de dolor, no consigo gritar tu nombre ni tocar tu silueta invisible en mi cama…

Muero poco a poco, siento como mi corazón deja de cantar tu nombre, las silabas de su voz cada vez suenan más bajo y todo se apaga a mi andar… No siento, no respiro… No vivo…

Me alejo del cuerpo que un día te amó, me elevo a un infierno de placer infinito… te busco en mi nuevo hogar mas no consigo hallarte en él…. Desespero… te necesito…

Conjuntos de rostros sin luz se elevan ante mí regalándome esperanza inútil, palabras sin sentido que buscan aplacar la desidia de un entender inepto…  Te espero

Sin más coraza que aquel hilo de esperanza que aún cuelga de mi corazón inerte me embarco en la guerra de tu querer, lucho, caigo, me levanto y vuelvo a remeter contra tu voluntad, contra aquel rechazo que niego a mis ojos,a mi entender… Caigo herido… no siento, no veo… muero lentamente aferrado a tu ojos, que ayer iluminaban mi vida…. Y hoy se cierran ante mi dolor…. He muerto bajo tu sed de libertad, de un no querer mi ser… sin entender abandono este mundo de dolor sin nada que en él me retenga… muero, he muerto… te perdono… te condeno

1 comentario:

  1. Se puede morir en la guerra del dolor,pero también se puede resurgir como el "AVE FÉNIX"...Tu mejor que nadie.

    Un beso.

    ResponderEliminar